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Día 5: Nuestra directiva principal 

8 de enero de 2026

Por Ron Bowell, obispo de la Conferencia del Medio Oeste 

Meditación de las Escrituras: Lucas 19:10 – “Pues el Hijo del Hombre vino a buscar y a salvar a los que están perdidos”. (NTV) 

Elemento de discipulado: Abrazar la vida y las enseñanzas de Jesús en la vida diaria, lo cual conlleva un cambio de mentalidad y de estilo de vida. 

Cuando los cristianos hablan de abrazar la vida y las enseñanzas de Jesús en la vida diaria, a menudo se refieren a convertirse en imitadores del amor, la bondad y la compasión que Jesús demostró hacia quienes conoció durante su ministerio. ¡Esto está muy bien, por cierto! Pero yo sugeriría que otra parte importante de abrazar la vida y las enseñanzas de Cristo en la vida diaria sería aceptar el propósito de su venida y adoptarlo como propio. Obviamente, hacerlo cambiaría nuestra forma de pensar y nuestro estilo de vida. 

¿Cuál fue el propósito de Cristo al venir? Jesús nos dice en Lucas 19:10: “El Hijo del Hombre vino a buscar y salvar a los que están perdidos”. Si eres fanático de Star Trek, esto se llamaría su “Directiva principal”. 

En su autoproclamada declaración de propósito, Jesús revela que la salvación de las almas es la razón por la que vino a la tierra. Aceptar su vida y sus enseñanzas debería impulsarnos, como seguidores, a hacer de su propósito el nuestro. Su propósito de venir se convierte en nuestro propósito de ir. Su propósito al morir se convierte en nuestro propósito al vivir. 

Las vidas transformadas no son sólo para beneficio de quienes están en proceso de transformación. Se trata de iluminar un mundo oscuro. Se trata de buscar la oveja perdida. Se trata de cuidar a los demás lo suficiente como para arriesgarnos a decirles la verdad con amor, mientras compartimos el evangelio con nuestra vida y con nuestra boca. No nos pertenecemos a nosotros mismos. 

Nuestro Dios es un Dios que salva y envía. En este nuevo año, pídele al Señor que te use para buscar y salvar a los perdidos. Ésta es una manera de “abrazar la vida y las enseñanzas de Jesús en la vida diaria”. También sería evidencia de un cambio de mentalidad y de estilo de vida que nos llevará más allá de convertirnos simplemente en “mejores personas”. 

Alguien que conoces necesita que compartas el evangelio con ellos. Quizás seas el único que pueda brindarles la verdad y el amor que necesitan. Podrías contribuir a que se conviertan en discípulos de Jesús. ¡Qué honor! ¡Qué privilegio! ¡Qué llamado! 

Oración

Padre, oro para poder entrelazar la vida y las enseñanzas de Jesús en mi vida diaria para que mi forma de pensar y mi estilo de vida atraigan a otros hacia ti. Que mis palabras y mi vida sean de gran ayuda para ti mientras avanzas para buscar y salvar a los perdidos. Amén.